Cuando el frio llega esta crema de zanahoria y manzana con queso roquefort forma parte de mi recetario de platos calientes y reconstituyentes.
Una crema asi te ayuda a entrar en calor en los dias más duros de invierno y te hace sentir mejor.
Es un entrante caliente y delicioso que permite a los más reacios tomar verduras aceptarlas sin problemas.
El color de las cremas de verduras resultan atractivos. Su textura agradable y sabor suaves las hacen apetecibles mucho más que en su forma normal, sobre todo, con niños.
Son además platos bajos en calorías, hidratan y salen a cuenta para alimentar a una gran cantidad de personas.
Para elaborar un puré o crema de temporada, debemos utilizar ingredientes variados, que den lugar a combinaciones sorprendentes como esta crema de zanahoria y manzana con queso roquefort.
Para la elaboración de cremas y purés de temporada, se utilizan por lo general ingredientes muy variados con infinidad de combinaciones.
Aparte de utilizar productos de plena temporada, en su justo punto de maduración, que potenciaran su dulzor propio.
Las cremas pueden adaptarse a los gustos y necesidades de la familia y la época del año, frias o calientes.
Se trata en definitiva de que las cremas y la cocina en casa sea lo más imaginativa posible sin caer en la rutina o monotonía.
Con las cremas ocurre que puedes transformarlas creando unas cuantas guarniciones fáciles y especiales que harán que tu crema casera se convierta en un plato de otro nivel.
Elige la crema que más te apetece. Verduras y legumbres, arroz y patata son las más habituales o combinadas que se verán enriquecidas.
En realidad, son perfectas para obtener una buena dosis de verdura cuando no apetece comer ensalada.
En casa somos consumidores de cremas en invierno. Son el primer plato calentito y apetecible al llegar a casa cuando llega el frío.
Seguramente, te convenceré sin esfuerzo. Pero si necesitas alguna razón más te diré que no engordan y que son perfectas para toda la familia.
Por ello te sugiero la receta de crema de brocoli o la crema de calazaba al curry, asi como la crema de verduras de toda la vida, extraordinaria asi como la crema de champiñones.
Elaborar una crema de verdura es fácil pero no está de más seguir algunos trcuos para que las cremas y pures de temporada resulten sabrosas y nutritivas.
Por lo general, elegir una verdura de temporada, en su punto.
El siguiente paso es cortar la verdura y hortaliza de igual tamaño para que la la hora de la cocción se hagan en el mismo tiempo. Asi nos evitaremos unos trozos hechos y otros aún duros.
Una vez peladas y cortadas el chorro de aceite de oliva y el acompañamiento de cebolleta y puerro les darán aroma y sabor asi como la pimienta y especias que más nos gusten.
LLegado a este punto, la base para nuestra crema está en marcha. Bastará con dejar que los verduras se doren y suden, aportando a nuestra crema todo su sabor.
El líquido debe ser el necesario, sin excesos, cubrir las verduras sin más. Tiempo habrá de añadir si vemos que hace falta, mejor caldo de verdura o ave pero también agua según conveniencia.
También es un buen recurso quitar el liquido sobrante antes de triturar. Siempre podemos añadir más.
Para espesarlas puedes emplear patata, o añadir legumbre o arroz.
Como bien sabrás la gran diferencia entre un puré y una crema es que éstas últimas llevan algún tipo de lácteo incorporado, alguno más ligero que otro, es verdad.
Esta cremosidad extra puede venir de la mano de una buena nata, yogur, queso, o leche evaporada, añadidos en el último momento antes de triturar.
Probablemente, pasadas las fiestas navideñas hayas sentido la necesidad, como todos, de aligerar tus menus caseros. No me extraña, en casa hacemos lo mismo. Demasiadas comidas, copiosas y maravillosas son la esencia de la Navidad en familia.
Sin embargo, hay que limitar tanta caloria y volver a retomar el camino de la dieta variada, rica, multicolor en la que verduras, hortalizas y frutas sean las protagonistas.
Aqui, es donde las cremas cobran especial protagonismo. Además, si son caseras, son lo mejor.
Por otra lado, si partes de un buen caldo casero de ave o verdura , ya tienes la mitad de la crema elaborada,.Así,de fácil.
Cómo hacer una crema de zanahoria y manzana con topping de queso
Comienza por un buen caldo casero de pollo o verdura. Si no lo tienes, recurre a un buen caldo envasado, que te sacará del apuro. No te agobies.
Corta cebollletas y puerros en dados pequeños. Aparte pela y trocea zanahoria, manzana y patata.
En una olla o cazo con fondo derrite mantequilla y aceite de oliva virgen extra a potencia fuerte.
Rehoga cebolletas y puerros hasta que empiecen a dorar.
Incorpora la zanahora, la patata y la manzana. Salpimenta.
Mantenlo todo al fuego un par de minutos más.
Agrega el caldo y cuando rompa a hervir, baja la potencia del fuego para que las verduras se ablanden lentamente.
Después de 30 minutos añade la leche evaporada y tritura el contenido de la olla.
Debes obtener una crema lisa y muy suave.
Sirvela acompañada de una nube de leche evaporada y queso roquefort.
Si puedes y te apetece sustituye la versión light por nata, crema agria, e incluso queso cabrales, deliciosa también.
Añade cualquier topping que te pueda apetecer, como picatostes caseros untados con ajo, te encantarán.
Ingredientes para 4 personas
40 grs mantequilla sin sal
25 ml de aceite de oliva virgen extra
2 chalotas o cebolletas
750 grs zanahoria
2 puerros
1 patata mediana
1 manzana golden
pimienta
sal
1 litro de caldo de pollo (casero a ser posible)
100 ml leche evaporada
picatostes (opcional)
50 grs queso Roquefort (cabrales)
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