Esta receta de Bizcocho de yogur de limón fue la primera receta dulce que aprendí en casa.
Seguro que a ti también te trae recuerdos de familia, el olor a limón en la cocina, la receta de la abuela aprendida de memoria y cocinar con tu madre este clásico bizcocho, el de tu casa.
A mí, mucho la verdad. Mi abuela ya la hacia y yo he seguido elaborándola igual porque es un bizcocho básico que no falla nunca.
Este bizcocho de yogur y limón es esa receta de bizcocho jugoso, esponjoso y con un aroma increíble. Es de esas recetas dulces sencillas de siempre que te permite decir: sí, lo he hecho yo.
Al menos a mí me parece el bizcocho más sencillo de todos. Un bocado dulce que gusta a todos por igual y es absolutamente delicioso para desayunos y meriendas.
Si dudas cuando recibes a alguien en casa -ya sé que ahora es difícil tener invitados- pero seguro que van a volver. Entonces será el momento de improvisar una merecida merienda y que mejor que ofrecer algo casero y riquísimo como es este bizcocho de yogur.
Una receta básica de repostería, que puedes seguir sin tener grandes conocimientos. Si yo soy capaz, tú también y quizá te anime a adentrarte en este mundo que gusta tanto y que no siempre resulta fácil.
Cuando hago repostería casera básica siempre pienso en mi familia. Resulta tan fácil hacerles felices en fin de semana o en ocasiones especiales.
Pero también, valoro mucho que prefieran algo casero y auténtico a la repostería industrial que tan a mano tenemos en cualquier superficie.
En realidad, con muy poco esfuerzo, podemos disfrutar de repostería natural, siempre adaptada a vuestras necesidades, tanto de alergias como nutricionales y vuestros gustos personales.
Siempre hay opciones saludables al azúcar para poder disfrutar de un bizcocho o dulces caseros: panela, masa de dátiles, azúcar de coco, etc.
Los bizcochos caseros siempre apetecen, son uno de los postres básicos que siempre han formado parte de nuestra pastelería.
Con ingredientes básicos y naturales, harina, huevos frescos y aceite, siempre han tenido un hueco preferente en nuestra cocina tradicional, desde el más básico como bizcocho genovés hasta un original bizcocho de zanahoria con jengibre, una combinación muy especial.
Desde luego no hay sensación más placentera que un bizcocho casero recién horneado en tú cocina. Son más saludables y sabrosos que los que puedas comprar, sin aditivos ni conservantes.
Es mucho mejor lo casero a cualquier tipo de bollería industria. Si puedes evítalo, además podrás pasar un tiempo precioso en familia.
Aunque te pase muy a menudo aquello de “no me sube” o “siempre sale duro”, créeme date tiempo y sigue intentándolo empezando por este bizcocho de yogur de limón, ya que este post está hecho a tu medida.
Y pronto te verás preparando magdalenas de limón o porqué no, un riquísimo pie de limón.
Conviene siempre a la hora de enfrentarse a una receta de repostería, tanto para los amantes como para principiantes, mantener ciertas normas: ingredientes frescos y de calidad, como los huevos, mantenerlos a temperatura ambiente, pesar los ingredientes y tenerlos dispuestos, te ahorraran tiempo y no olvidarás ninguno.
Conocer tu horno también es fundamental, cada horno es un mundo y los mismos grados en uno no funcionan igual en otro. Practica y no desesperes, al final sale.
Por lo general los bizcochos son de nuestros postres preferidos.
Además nos ofrecen una amplia variedad de formas de elaborarlos, desde el limón como este bizcocho casero de hoy, hasta otros más novedosos como el de zanahoria.
Siempre hay un bizcocho para cada ocasión.
Cómo hacer bizcocho de limón y yogur
Como te contaba unas líneas más arriba este bizcocho tradicional de limón y yogur es ideal para iniciarte en el mundo de la repostería.
Ten tus ingredientes pesados y a mano (mise en place) y saborearas un bizcocho en menos de lo que imaginas.
Precalienta el horno con calor arriba y abajo a 180º. Coloca la rejilla en la segunda guía del horno comenzando a contar desde abajo.
Engrasa el molde con spray desmoldante, espolvorea con harina y gira el molde (rosco redondo 22,5x 7,5) para eliminar lo que sobre.
Si empleas un molde redondo puedes usar papel sulfurizado.
En un bol amplio, bate los huevos con el azúcar durante unos 5 minutos. Debes conseguir una mezcla blanquecina.
Agrega la ralladura de limón junto con el aceite y una cucharada de agua de azahar. Continúa batiendo.
Incorpora la harina tamizada junto a la levadura y la pizca de sal. Añádela en 3 veces, mezclando suavemente, antes de agregar la siguiente tanda.
Ahora vierte la mezcla en el molde. Usa una espátula para ayudarte y asienta la masa con unos golpecitos contra la encimera.
Hornea a 180º durante 20 minutos. Después baja la temperatura a 170º y hornea entre 15- 20 minutos más, hasta dorar.
Puedes comprobar con una brocheta de madera el centro del bizcocho. Si ésta sale limpia, el bizcocho está listo.
Terminada la cocción retira el bizcocho del horno. Deja entibiar 10 minutos en su molde. Pasados esos minutos desmolda sobre una rejilla y espera que enfríe por completo.
Para acabar, espolvorea con azúcar glas. Esta presentación resulta muy delicada y le aporta un extra de dulzor.
Añade ralladura de limón y almendra laminada tostada.
Resulta absolutamente exquisito en cualquier desayuno o merienda con leche o una buena taza de té.
En mi caso he añadido para presentarlo unas hojas verdes nuevas de limonero que resaltan su color dorado.
Pura sencillez.
- Un yogur sabor limón (en adelante úsalo como medida)
- 1 medida de aceite de oliva suave o girasol.
- 3 huevos enteros tamaño L
- 3 medidas de harina de uso común o repostería
- Pizca de sal
- Levadura tipo Royal 1 sobre
- 2 medidas de azúcar blanquilla
- 1 cucharada de agua de azahar
- Azúcar glas para espolvorear
- Ralladura de 1 limón + extra para decorar
- 25 gr de almendras laminadas tostadas
- Precalienta el horno. Calor arriba y abajo a 180º. Coloca la rejilla en la segunda guía del horno comenzando a contar desde abajo.
- Engrasa el molde con spray desmoldante, espolvorea con harina y gira el molde (rosco redondo en mi caso) para eliminar lo que sobre.
- Un l molde redondo te permite poner papel vegetal en su base..
- En un bol amplio, bate los huevos con el azúcar. Debes conseguir una mezcla blanquecina. Te llevará unos 5 minutos.
- Agrega la ralladura de limón junto con el aceite y una cucharada de agua de azahar. Continúa batiendo.
- Incorpora la harina tamizada junto a la levadura y la pizca de sal. Añade la harina en dos o tres veces, mezclando suavemente, antes de agregar la siguiente tanda.
- Vierte la mezcla en el molde. Usa una espátula para ayudarte y asienta la masa con unos golpecitos contra la piedra de la encimera.
- Hornea a 180º durante 20 minutos. Después baja la temperatura a 170º y hornea entre 15- 20 minutos más, hasta dorar.
- Comprueba con una brocheta de madera el centro del bizcocho. Cuando salga limpio, ya lo tienes. De lo contrario, deja unos minutos más.
- Terminada la cocción retira el bizcocho del horno.
- Deja entibiar 10 minutos en su molde. Pasados esos minutos desmolda sobre una rejilla y espera que enfríe por completo.
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