Esta receta de albóndigas en salsa es una de esas recetas que recuerdas siempre con cariño de casa.
De pequeña vivíamos con nuestros abuelos paternos, en una casa enorme. Mis abuelos ocupaban el piso bajo y nosotros, mis padres y hermanos vivíamos en el primer piso.
Era estupendo vivir con los abuelos sobre todo pensando que éramos nietos únicos. Pero es que, además teníamos la ventaja de disponer de dos menús diarios. Podíamos comer con la abuela o con nuestros padres .
De modo que a la vuelta del cole, el olor a comida cuando entrábamos ya nos iba dando pistas de lo que podía estar preparando la abuela; echabas una ojeada y luego subías a ver que había preparado mamá.
Después, llegaba la decisión, pues hoy como con la abuela o con mamá. Así fue durante muchos años, hasta que la abuela se puso mayor y mi madre cocinaba para todos.
Sin embargo, el día que había albóndigas en salsa mi abuela salía triunfante.
Solía prepararlas de dos maneras que yo recuerde: las tradicionales albóndigas con caldo cordobesas y estas albóndigas en salsa de almendras y azafrán, que son las que preparo hoy.
Las albóndigas creo que gustan a todos incluso a los más pequeños de la casa. Es un plato humilde, sabroso y práctico porque puedes tenerlas preparadas con antelación y pueden ser congeladas, sin ningún problema.
También se pueden combinar estupendamente con verduras, pasta o arroz.
Son dignas de un buen” tupper”, de esos que te salvan la vida en tantas ocasiones. Un golpe de microondas y listas para comer. En casa o en el trabajo resultan perfectas.
Las albóndigas tiene infinitas posibilidades, desde las más sencillas hasta recetas con ingredientes nuevos y diferentes que hacen que no nos cansemos nunca de tomarlas.
Son un clásico las de mitad ternera y cerdo, mis favoritas porque éste último les da una jugosidad increíble.
En mi ciudad tanto la receta de albóndigas en salsa de almendras y azafrán como la de albóndigas con caldo son las típicas tapas a la hora de disfrutar de un buen tapeo.
La tapa suele consistir en un par de maravillosas albóndigas con su salsa y un trocito de pan, que cuando se moja sabe a gloria.
Estas dos recetas son las más clásicas y son las que más recuerdos sobre comida casera de siempre me traen junto al pastel de carne al horno ,que os recomiendo o unas deliciosas hamburguesas caseras con queso cheddar y salsa de mango.
Sin embargo, la albóndiga admite todos los ingredientes que podamos imaginar como el bacalao, todo un clásico, las albóndigas de rabo de toro, las de choco o merluza. Personalmente me encantan las de choco.
Quizá en ocasiones podemos innovar un poco y acompañarlas de salsa y especias más exóticas como la salsa de soja o teriyaki.
Qué duda cabe, que las albóndigas forman parte del recetario más tradicional y nunca pasan de moda.
Y es que una deliciosa albóndiga no es más que una jugosa bola de carne picada. En otras ocasiones de pescado; mezclada con huevo y condimentos varios: perejil, comino, azafrán, etc.
Son tan populares que en cualquier parte del mundo hay un tipo de albóndiga esperando que la probemos. Y si, se pueden llamar “almóndigas” ya que el diccionario de la lengua española la admite como tal.
Es por otra parte uno de los platos más conocidos de origen árabe. Ellos a las bolas de carne picada las llamaban búndigas, que pasaron a nuestra lengua como albóndigas (al- búnduga-la bola).
Unas ricas albóndigas en salsa pueden acompañarse como ya os comentaba con arroz o patatas si queremos un primer o único plato más contundente o con verdura si lo queremos aligerar de calorías.
Personalmente, me gusta acompañarlas con algo de verdura como una buena ensalada de lechuga y granada que ahora en otoño están en su mejor momento.
Pero siempre con un buen trozo de pan para mojar en esta increíble salsa.
Que duda cabe que hay quien no renuncia a unas buenas patatas fritas caseras y aunque la receta gana en calorías no pueden estar más deliciosas.
Últimamente además, suelo hacerlas al horno o a la plancha con 2 o 3 cucharadas de aceite en vez de recurrir a la fritura para no aportarles más calorías de la cuenta. Resultan igual de ricas.
Cómo hacer albóndigas en salsa
Por supuesto, que el punto de partida debe ser una buena carne de res de calidad o ternera y cerdo mitad y mitad (esta es la mezcla que más me gusta, creo que la jugosidad de la albóndiga aumenta).
Podemos comprar la carne ya picada, pero mucho mejor si nuestro carnicero de confianza nos la pica.
Empezamos poniendo miga de pan a remojo en leche, durante 10 minutos.
Aparte, en un bol o ensaladera ponemos la carne, el pan (previamente exprimido), sal, huevo, pimienta, perejil, ajo bien picado, taquitos de jamón, 3 hebras de azafrán y comino molido.
Hay que trabajar esta mezcla con la mano o con un tenedor hasta integrar los ingredientes por completo.
Dejar reposar por espacio de unas horas, para que los ingredientes se integren perfectamente.
Hacemos bolas de un tamaño medio o más grande si lo preferís.
Mi abuela ponía un cuenco con vino blanco, mojaba la palma de la mano y hacía la bola de carne o albóndiga. Yo hago lo mismo.
Enharinamos las albóndigas desechando el exceso de harina. Sólo lo justo.
Aparte en una sartén amplia (podéis freírlas en abundante aceite, si así lo preferis) ponemos 3 ó 4 cucharadas de aceite de oliva y las salteamos a fuego vivo, justo para que se doren y queden crudas por dentro. En este caso no se fríen y os aseguro que resultan igual de buenas.
Se sacan y se reservan.
Salsa de almendras
- En la misma sartén en la que hemos dorado las albóndigas, ponemos ajo, cebolla y almendras picadas ( añade aceite si ves que no hay suficiente)para el sofrito, a fuego lento. Después lo majamos o trituramos.
- Añade el caldo de pollo y vino. Añadimos sal y azafrán (hebras) así como el majado.
- Mezclamos.
- Añadimos las albóndigas a la salsa y dejamos cocer despacio durante 15 minutos. Rectificamos de nuevo el punto de sal, si fuese necesario.
- 500 grs carne ternera
- 500 grs carne cerdo
- 3 dientes de ajo
- 40 grs pan rallado
- 3 huevos tamaño L
- 1 cucharadita comino
- ¼ cucharadita pimienta
- 1 cebolla
- perejil
- sal
- harina
- pan rallado
- aceite oliva virgen extra
- azafrán en hebra (8 hebras)
- Caldo de pollo o agua 750ml- 1 litro
- Vino blanco de calidad ½ vaso
- taquitos jamón
- 40 grs de almendra marcona cruda
- 30 grs de pan
- 1 taza pequeña de leche
- Empezamos poniendo miga de pan a remojo en leche, durante 10 minutos.
- Aparte, en un bol o ensaladera ponemos la carne, el pan (previamente exprimido), sal, huevo, pimienta, perejil, ajo bien picado , taquitos de jamón , pan rallado (muy poco) 3 hebras de azafrán, y comino molido.
- Hay que trabajar esta mezcla con la mano o con un tenedor hasta integrar los ingredientes por completo.
- Dejar reposar por espacio de unas horas, para que los ingredientes amalgamen.
- Hacemos bolas de un tamaño medio o más grande a vuestra elección.
- Mi abuela ponía un cuenco con vino blanco, mojaba la palma de la mano y hacía la bola de carne o albóndiga. Yo hago lo mismo.
- Enharinamos las albóndigas desechando el exceso de harina. Sólo lo justo.
- Aparten en una sartén amplia (podéis freírlas en abundante aceite si lo preferís así ) ponemos 3 o 4 cucharadas de aceite de oliva y las doramos a fuego vivo, justo para que se doren y queden crudas por dentro.
- Solo 4 o 5 albóndigas por tanda.
- Se sacan y se reservan.
- Salsa de almendras
- En la misma sartén en la que hemos dorado las albóndigas, ponemos ajo, cebolla y almendras a fuego lento. Después lo majamos.
- Una vez limpia la sartén, añadimos caldo de pollo y vino. Añadimos sal y azafrán (hebras) así como el majado.
- Mezclamos.
- Añadimos las albóndigas a la salsa y dejamos cocer despacio durante 15 minutos. Rectificamos de nuevo el punto de sal.
Hola, en los ingredientes refiere una cebolla pero en el procedimiento no dice que haremos con ella, puede decirme si es para la salsa o albóndigas
Hola Marisa,
En primer lugar mil perdones porque tu comentario se me habia pasado.
Hoy lo he visto repsando el post de albondigas en salsa.
Respecto a la cebolla te comento que la pongo para hacer la salsa de almendras, no va ligada a la carne.
En la misma sartén en la que hemos dorado las albóndigas, ponemos ajo, cebolla y almendras picadas ( añade aceite si ves que no hay suficiente)para el sofrito, a fuego lento. Después lo majamos o trituramos.
Espero que ya lo tengas más claro.
Besotes.
Hola:
Para la salsa de almendras no indicas cantidad de vino ni de caldo de pollo.
¿Cuanto hace falta?
Gracias.
Hola Mamen, tienes toda la razón.
Te comento que con 750 ml a 1 litro de caldo de pollo o agua tienes, luego depende de lo que tu quieras reducir la
salsa. Mientras más reduzcas más densa como bien sabes.
En cuanto al vino con 1/2 vaso de los de tipo agua es suficiente.
Mil gracias por comentar y rectifico.