Ya sea con calor o con tiempo más fresco un bizcocho nunca falta en casa y este bizcocho de naranja y almendra es una de mis recetas estrella.
Hoy te cuento cómo hacer un sencillo bizcocho de naranja y almendra y porqué es una receta que siempre está presente en nuestro hogar.
Por lo general, siempre recuerdo a mi abuela cuando horneo un bizcocho. Ella, muy sabia, como todas nuestras abuelas, me decía que hacer un bizcocho era como hacer magia.
Podéis imaginar mi cara cuando todavía una niña, mi abuela se descolgaba con semejante frase.
Ahora todo tiene sentido, ahora lo veo claro cada vez que hago una receta de bizcocho casero.
Efectivamente, como decía ella, algo de magia hay en transformar unos ingredientes muy sencillos algo tan delicioso como un pastel casero.
Un bizcocho casero siempre resulta perfecto para regalar, si se trata de agradecer algo a alguien ¡que mejor manera!; si hay que llevar a clase un dulce porque es el cumpleaños de nuestro hijo o el nuestro, resulta un detalle personalisimo sin recurrir a la traicionera bollería industrial; es en estos casos cuando un bizcocho rico, esponjoso y casero es ideal.
A mí me entusiasman, creo que como a casi todos, aunque es verdad que algunos ante la frase « hagamos un bizcocho » se echan atrás porque les parece complicado o tedioso. Quizá de antemano piensan que no saldrá o simplemente es más fácil ir al supermercado y comprar uno industrial.
Todo lo contrario. Si hacemos el bizcocho sabremos con toda seguridad qué lleva; si somos intolerantes a algún ingrediente sencillamente se evita; que no nos apetece usar mantequilla pues aceite de girasol o un sano aceite de oliva; que lo queremos de naranja ,pues ralladura, canela, vainilla y así hasta donde podáis imaginar.
En realidad, un bizcocho es una masa compuesta de harina, huevo, azúcar y algo de levadura que se cocina en el horno dentro de un molde.
En un bizcocho lo verdaderamente importante es que esté esponjoso, tierno y si es bonito porque el molde lo es, pues entonces ya es el no va más.
Me gusta el sabor de lo tradicional, el valor de lo realmente auténtico, el olor que queda en casa tras hornear un bizcocho. De ahí que os recomiende también el bizcocho marmolado, una auténtica locura para los amantes del chocolate y el bizcocho de zanahoria con jengibre, no hay excusa para no hacerlo.
Con toda seguridad, los olores os traerán recuerdos de vuestra niñez, al menos a mí me pasa y de repente recuerdas a las mujeres de tu familia y tú niña, observando atenta a todo lo que se cocía en la cocina familiar.
Por eso yo ahora vuelvo a vivir con mi hija esa sensación de nuevo; creo estoy teniendo la gran suerte de que le gusta cocinar y quiero pensar que se alimentará bien en el futuro.
Receta de bizcocho de naranja casero
No os cuento nada nuevo si os digo que hacer un buen bizcocho, con ingredientes naturales, sencillo pero delicioso no se tarda más de 15 minutos aunque dependerá siempre de la receta, no nos llevará demasiado tiempo.
Por lo general, el resto del tiempo, es horneado y aquí no hay trabajo para nosotros.
Por esta razón, hemos de animarnos a elaborar uno casero, olvidándonos de conservantes, emulgentes, aceite vegetales de dudosa procedencia y en general, del horror que produce el etiquetado de algunos productos.
Pero vamos a la receta que ya veréis como no os asusta para nada.
Primero, como siempre precalentamos el horno a unos 180º, calor arriba y abajo, sin ventilador.
Segundo, encamisamos bien el molde elegido (engrasar con mantequilla) y también con harina. Podéis usar spray desmoldante que da muy buen resultado.
Tamizar la harina junto a la levadura y la sal. Reservar.
Batir enérgicamente los huevos con el aceite y añadir ralladura de naranja.
Añadir el azúcar. Batir de nuevo hasta ligar perfectamente.
Añadimos ahora la harina y la levadura en 3 veces, alternando con la leche .
Mezclar bien de a poco con ayuda de una espátula, con movimientos suaves, hasta que la masa esté lisa, libre de grumos.
Finalmente añadir la almendra molida y mezclar para que quede repartida por toda la masa.
Verter la mezcla en el molde.
Hornear durante unos 60-70 minutos o hasta que introduciendo un palillo salga perfectamente limpio.
Cuando esté, sacarlo del horno. Dejamos que enfríe unos 15 minutos.
Desmoldamos. Dejamos enfriar por completo sobre una rejilla.
Ahora es el momento de añadir la almendra laminada y espolvorear con azúcar glas.
Para este delicioso bizcocho de naranja y almendra, que os solucionará más de un desayuno o meriendas he utilizado un molde de los denominados bundt.
Son tan atractivos y los bizcochos quedan tan bien, sobre todo si tenéis un modelo sofisticado que sólo tendréis que verter sobre ellos un poco de masa y la magia se obra en el horno.
Sólo tienen un pero, su precio, no son baratos pero creo que una pequeña inversión en un molde si os gusta la cocina y sois unos frikis de los utensilios de cocina como soy yo, será un acierto seguro.
Estos moldes son geniales, cualquier simple receta, como la del bizcocho con la medida del yogur y quedas como si fueras un gran repostero.
Sólo os queda hacer este bizcocho que es suave y esponjoso, con un sabor a cítrico que inunda el paladar y que mojado en café sabe a gloria.
Hacedlo y me contáis qué tal os ha ido.
- 360 gr azúcar/ panela
- 3 huevos L
- 180 ml aceite girasol
- 3 cucharaditas y ½ de levadura química
- 320 gr de harina de trigo
- 1 pizca de sal
- 120 ml leche semidesnatada
- ralladura de naranja (1)
- 60 gr almendra molida
- 70 grs almendra laminada (para decorar)
- 50 gr azúcar glass (para decorar)
- bastoncitos piel de naranja (para decorar)
- Primero, como siempre precalentamos el horno a unos 180º, calor arriba y abajo, sin ventilador.
- Segundo, encamisamos bien el molde elegido ( engrasar con mantequilla ) y también con harina. Podéis usar spray desmoldante que da muy buen resultado.
- Tamizar la harina junto a la levadura y la sal. Reservar.
- Batir enérgicamente los huevos con el aceite y añadir ralladura de naranja.
- Añadir el azúcar. Batir de nuevo hasta ligar perfectamente.
- Añadimos ahora la harina y la levadura en 3 veces, alternando con la leche .
- Mezclar bien de a poco con ayuda de una espátula , con movimientos suaves, hasta que la masa esté lisa, libre de grumos.
- Finalmente añadir la almendra molida y mezclar para que quede repartida por toda la masa.
- Verter la mezcla en el molde.
- Hornear durante unos 60-70 minutos o hasta que introduciendo un palillo salga perfectamente limpio.
- Cuando esté , sacarlo del horno. Dejamos que enfríe unos 15 minutos.
- Desmoldamos. Dejamos enfriar por completo sobre una rejilla.
- Añade almendra laminada y espolvorea con azúcar glas.
Que recuerdos trae ver horneandose uno bizcocho. Yo era de esa personas que pensaba que los bizcochos eran super difícil de hacer pero ahora que les perdí el miedo ya los hago muy a menudo